INVESTIGAR PARA INNOVAR Y TRANSFORMAR
“Investigar es transformar dinero en conocimiento. Innovar
es transformar conocimiento en dinero." Paolo Colonnello, chileno y
director de Blue Company.
¿Eres de los investigadores que sólo hace lo que le piden?
¿O te consideras proactivo y propositivo?
Si eres de estos últimos, ¡felicitaciones!, si eres de los
primeros entonces es el tiempo adecuado para que replantees tu actitud, y no te
dejes llevar por la 'Ley del menor esfuerzo'. Scoot Aaron, director de Insights
for Innovation en Cincinnati – Estados Unidos puso un desafío a su equipo de
investigadores: los invitó a que cada uno presentara al menos un proyecto de
investigación innovador para este año, argumentando que eso significaría una
mina de oro para la compañía y por ende para cada uno de ellos a nivel
profesional, repercutiendo en ascensos, mejores salarios y en el
redescubrimiento de talentos y aptitudes personales. Muchos de esos
investigadores reconocieron que el reto era bastante interesante y motivador,
pues normalmente solían 'acomodarse' en los parámetros ya establecidos y sólo
estaban dedicándose a ejecutar, sin proponer nada, sin hacer lo que 'les
gusta'. Concluyeron todos que debían salirse de la zona de confort. "Hoy
en día, debe quedar claro que para competir hay que innovar", añade el
analista de Agronegocios en Perú, Bruno Barbieri.
¿Y cómo logro innovar en investigación?
• Para iniciar: cuestiónate, define para ti qué es innovar,
pues realmente hay muchas definiciones, sin embargo es importante que veas el
contexto en el que te mueves.
• Luego: Observa cómo es tu trabajo, detecta qué funciona y
qué no, encuentra la manera de enfocarlo de forma que 'te saque del sitio en el
que te encuentras', 'te mueva', 'te ponga a hacer cosas que antes no hacías' y
alcances nuevas metas.
• También: puedes ayudarte asociándote con otros grupos de
investigación, proveedores o colegas. Contacta a "gurús" de tu
gremio, asiste a eventos relacionados, comparte ideas con otros y une con ellos
tu fuerza de trabajo. No en vano, Albert Einstein decía: "si quieres algo
distinto no hagas siempre lo mismo".
• Ten en cuenta: el contexto histórico tecnológico en el que
vivimos es algo que no debes descuidar, nos referimos a todo este boom mediático,
de las redes sociales, del internet, sírvete de ello. Te presentamos varias
opciones para que 'le eches una miradita' y evalúes si es por ahí por donde
quieres y puedes meterte: "¿Cómo puede Facebook convertirse en una
herramienta de investigación cualitativa?", "Más de 10 aplicaciones
para usar Twitter en la investigación de mercados" , "20 herramientas
para que comiences a hacer investigación cualitativa online", también
"4 maneras para que te atrevas a investigar de manera híbrida", así
mismo "No basta con sólo investigar tu mercado: Descubre el inconsciente
de tu cliente y juega creativamente con ello"
¡Atrévete a tomar el riesgo! Por último, ten en cuenta que
en esto hay dos resultados: el éxito y el fracaso. Cualquiera de los dos puede
llegar a tu puerta, y ambos son válidos. No le temas al fracaso, que este no
sea el obstáculo para emprender en esta nueva tarea, pues muchos de los grandes
innovadores lograron excelentes resultados luego de múltiples errores.
INQUIETUD DE UN INVESTIGADOR
En este primer momento el investigador debe ordenar y
sistematizar sus inquietudes y sus preguntas, y elaborar organizadamente los
conocimientos que constituyen su punto de partida. Es el momento en que se
produce la delimitación o distinción entre sujeto y objeto, y entonces el
investigador se ocupa en definir que es lo que quiere saber y respecto a qué
hechos. Esta es la fase en que se plantea explícitamente la "teoría
inicial" antes de partir hacia la verificación práctica. Es en este
momento cuando se plantean los problemas básicos de todo trabajo, donde hay que
atender preponderantemente a la racionalidad de lo que formulamos y a la
coherencia lógica del marco de teoría sobre los hechos que nos causan
inquietud.